martes, 26 de abril de 2011

Porque todos pensamos la respuesta.

Y es que , amigos míos, cuando vamos en metro, o en su variable en autobús, rodeados de gente y sin los cascos puestos (esto es importante). También se puede hacer en el silencio entre dos canciones pero creo que eso lo hago yo y 10 personas más , que somos así de raritos. Estás repasando los apuntes, porque leyendo un libro interesante estas cosas no pasan, y de repente se abren las puertas y entran dos personas hablando, se sientan cerca de ti, intentas seguir repasando y después de un momento de esforzarte y de darte cuenta que va a ser imposible, miras hacia el infinito y sin querer (o queriendo) te enteras de lo que hablan. Y seas hombre o mujer, cada uno genera su opinión acerca del tema así que vas respondiendo mentalmente como si tú también fueras parte de la conversación, incluso te creas una idea de la personas/s que están hablando. Y para cuando llegas a tu parada ya te sabes un cacho de vida de una persona y tu vena cotilla querría saber el final de la historia. Esta es la especie humana: cotilla por naturaleza, aunque algunos no lo admitan.


2 comentarios:

  1. ¿Cotillas? Cotillas es poco, la verdad jaja. Aunque a veces es interesante fijarte en la vida de los demás :)

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