martes, 30 de noviembre de 2010

Hombres.

No hay quien los entienda, si quieres una relación seria ellos no, si quieres un rollo, ellos prefieren ser moñas y tener una relación, si no les llamas es que pasas de ellos (muy cierto por otra parte) si no, que eres una pesada que necesita espacio para respirar, ¿que quieres ser su amiga? pues te jodes porque el quiere estar contigo, que te mola, él quiere ser tu amigo, de hecho seguro que te ve como una hermana o mínimo como a una prima, si les escuchas que no dices nada, si hablas mucho eres una cotorra, si le cuentas cosas eres una cotilla sino nunca le cuentas nada... ACLARAROS por favor. Yo para reyes me voy a pedir un manual, que seguro que el/la que lo escriba se forra a costa de las pobres personillas que no saben que hacer con su vida y como entender al sexo opuesto. Y luego dicen que son muy simples, ¿simples? venga, por favor  a vacilar a otro, sois igual de complicados que nosotras lo que pasa es que pensamos diferentes y no nos ponemos de acuerdo, así no hay quien se aclare. Para eso, queridas amigas, es mucho mejor nuestro amigo el chocolate, ese que nunca te dará problemas  (tampoco conversación pero que le vamos a hacer, para eso están las amigas) y no te vas a romper la cabeza, simplemente te lo compras, le quitas el papel y te lo comes, ¡qué habría sido la vida de las mujeres durante la historia sin este gran amigo fiel! (y no os engañéis que un perro no es lo mismo, babea). Y que conste que no es que me gusten los perros, simplemente me parecen un poco pesados.


¡SONRIE BABY! ¡SONRIE! Por lo que quieras, no necesitas ningún motivo concreto, ¿qué hace frio? bueno, es invierno, con un poco de suerte nieva y todo, ¿que tienes que estudiar? no pasa nada cuando hagas el examen no tendras nada que hacer, ¿que no puedes salir? pues mira mejor asi están con la matita y no te congelas. Si no es por una cosa es por otra, si no es por ti puede ser por cualquier otra cosa como las personitas singulares que se ponen esos gorros tan molones y que yo no me puedo poner porque me quedar fatal ¬¬ que penita, con lo que a mí me gustan. Y esque sí, hay gente que tiene una gracia especial para llevar los gorros esos invernales que tienen esas cosas que cuelgas y te tapan las orejas y encima con pompones y tan a gusto, y tan bien que les queda. Luego hay gente que lleva gorro y además orejeras de esas supercalentitas (como yo dentro de poco), y otra que llevan esos gorros con un superpompon en el centro de ese gorro singular. En fin.. reflexiones sobre gorros. No damos para más. 



lunes, 29 de noviembre de 2010

Nieve.

Nieve, nieve, nieve, si todo muy bonito, muy esponjoso, muy blanco hasta que te pilla andando por la calle. Y ya verás la gracias que te va a hacer que mañana por la mañana te levantes y veas todo el barrio lleno de nieve desde la ventana de tu habitación reciñen salida de la cama, calentita, con tus mantas tu edredón, y tu pijama de invierno, pero cuando te tengas que embuchar como una morcilla para salir a la calle que a penas tengas movilidad y encima tengas que ir a la Universidad para hacer un examen en vez de tirarte bolas de nieve en la calle, va a ser muy gracioso, sobre todo cuando, al ir hacia el metro, te caigas de culo y te llenes de nieve y vayas con el culo mojado. Y eso si no te saca nadie un ojo porque vaya con el `paraguas abierto. Además de todo esto irás con la bufanda hasta la nariz y sin el gorro ese que no te has comprado a tiempo porque pensabas que no iba  a nevar al menos de momento, y con los guantes que a pesar de llevarlos puestos sigues teniendo los dedos congelados porque tienes que ir sujetando el archivador y encima se te va resbalando y acercarse peligrosamente al suelo con la posibilidad de que se te caiga y se te mojen los apuntes que pensabas leerte en el metro.Además llevas el ipod en el bolsillo (canción rayada) y quieres cambiar, lo sacas con todo el esfuerzo del mundo después de  haber hecho malabares para que no se te cayera nada al suelo, lo sacas, y entonces recuerdas que es táctil (bendita tecnología, podemos  ver a una persona que está a  miles de kilómetros a través de una camarita pero no podemos pasar una canción con los guantes puestos. Eso lo han inventado los que se llaman genios, pues  a mí no me parecen tan geniales) así que te quitas el guante y ahora sí que sí, se te cae algo seguro, y encima se te está congelando más la mano. te encuentras en una de esas encrucijadas en tu vida, ¿qué haces antes? ¿te agachas a recoger lo que se  te haya caído antes de pasar la canción? ¿Pasas la canción, te guardas el ipod y te agachas a recoger las cosas? ¿o te guardas el ipod, recoges las cosas y luego pasas la canción? Eso sólo depende de ti, pero no te lo pienses demasiado que llegas tarde al examen, que a ver quien es el listo que llega a clase y le dice al profesor que ha llegado tarde porque no sabia si pasar de canción o coger las cosas que se le habían quedado al suelo. Eso no queda intelectual. 






Entonces después de haber recogido las cosas, haber pasado la canción o que hayas hecho te empiezas a reír como si fueras tonta mientras vas  hacia el metro porque te has acordado de que ayer cuando estabas en la biblioteca, tu concentrada en la resolución de los conflictos que te tenias que estudiar para el examen, levantas la cabeza porque escuchas una respiración muy fuerte entre el silencio, y luego un pequeño ronquido, sí, alguien no ha podido más con sus apuntes y se ha dormido ( no me extraña la verdad) entonces mira alrededor para ver si te estas volviendo loca y eres la única que lo escucha porque no lo ves debido a las miniparedes estas que hay en las mesas de las bibliotecas. Entonces miras a la gente y están inmersos en su mundo de estudio ( con los tapones o con ipod en los oídos. Que seguiré sin entender cómo la gente estudia con música, sobre todo si es hard rock) sigues mirando y se cruza tu mirada con la de tu vecina de la lado, os miráis extrañadas y sonreís, una persona que se entera de lo que pasa a su alrededor. Y es que muchas veces estamos tan inmersos en nuestras cosas que no nos damos cuenta de lo que les pasa a los demás, hasta que te cruzas con alguien que está igual que tú y te das cuenta de que en el mundo hay gente que mira a su alrededor y gente que solo se miran a ellos mismos y a su mundo.







Días de invierno.

domingo, 28 de noviembre de 2010

La vida no es tan difícil.

Si el mundo fuera difícil los niños se negarían a nacer. La vida es complicada pero no tan sumamente difícil como nosotros  nos la hacemos porque si no tenemos ningún problema ya nos buscamos algo, si no tienes que estudiar, te pones a leer, si no tienes que ir a ningún sitio quedas en el culo del mundo, si no te gusta nadie te sientes feliz pero solo, si te gusta alguien te sientes infeliz y solo y si te gusta y encima te hace caso te sientes acompañado pero dejas de lado a tus amigos, hombre por favor un poco de cordura el hecho de que no nos podamos multiplicar no significa que tengamos que renunciar a algo, hay tiempo para todo y tiempo de sobra, si no te hechas la siesta pues no te la echas y si te tienes que levantar antes te levantas pero tienes que tener tiempo suficiente para la gente que quieres y que te aprecia. Si eres vago, te jodes simplemente porque si no terminarás perdiendo quizá no hoy, ni mañana pero a largo plazo sí, y entonces te arrepentirás de no haberle dado el valor a lo que realmente tenias que habérselo dado. Y no vale eso de no puedo, ¿cómo que no puedes? Si un señor bajito con bigote movilizó a millones de personas y conquistó media Europa, ¿tu no puedes estudiar, quedar, salir, entrar? NO me vaciles, venga por favor. Así te minusvaloras, te crees menos que el mundo, que el que está al lado, que con la que te cruzas en la calle, en el metro, todos son mejores, más altos, más guapos, más graciosos, más habladores, tienen una vida mejor, ¿eso piensas? ¿en serio? Mírate, dentro de lo que cabe no estas tan mal, tienes una casa, acceso a Internet, gente que te llama, con la que quedas, con la que te cruzas, gente que sabes que existes, no te puedes sentir como una simple mota de polvo porque te sientas inferior a tanta gente, que quizá lo seas, no te digo yo que no, seguramente seas inferior a un montón de gente pero eso no quita lo que vales. Mírate y dime qué es lo que ves.


¿Sabes? Todos tenemos un don, para caer bien, para caer mal, para hacer enfadar a medio mundo, para pasar inadvertido, o simplemente para escuchar y dejar que el mundo se desahogue, dejas que el peso de los problemas de los demás recaiga sobre tus hombros pero así te sientes mejor, más humana, más a gusto contigo misma, mejor persona. Quizá no seas la mejor persona del mundo ni mucho menos pero en ese momento te siente bien. ¿Y por qué evitar ser como eres? Con tus errores y con tus virtudes, con esos pequeños defectos y esas pequeñas manías, ¿por qué la gente se empeña en cambiar? en ser quienes no son simplemente para agradar a los demás, ¿quien es el otro para juzgarte? Él no es perfecto ¿sabes? quizá lo parezca, quizá lo aparente... pero no lo es, simplemente es diferente a ti. Y es verdad que muchas veces las personas rechazamos lo diferente simplemente por eso, por no ser igual que nosotros, por no se igual que las personas con las que nos rodeamos pero ¿por qué? todavía no consigo entenderlo, y yo también soy de esas personas que me da miedo lo diferente, que muchas veces lo rechazo por eso mismo, por ser diferente, por no adecuarse a los clichés que marca la sociedad, la moda, por no ser como todo el mundo.. pero y ¿cómo es el mundo? ¿quién lo elije? ¿quién es el que decide?









sábado, 27 de noviembre de 2010

Tomates.

Sí, tomates y zanahorias... algo cuanto menos raro para poner en una pared, pero es que los del McDonald son muy transgresores y ahora se dedican a decorar sus paredes transparentes con tomates y zanahorias, se pudre ante tus narices, arte en estado puro y además le estas quitando el alimento a los pobres niños desnutridos del tercer mundo y ¿para qué? para ponerlo en una pared, sin que nadie (o casi nadie ) se percate de su presencia. Dentro de lo malo el McDonald siempre seguirá siendo un lugar calentito donde resguardarte del frío del invierno, y cuando sales a la calle con coloretes en los mofletes se te congela la nariz y se te pone la nariz roja pero a pesar de todo sientes el calor que produce el ver los adornos de navidad en el centro, ese árbol de Agata Ruiz de la Prada, la caseta de los duendes, la pista de hielo de Callao porque quieras o no, cuando ves esos adornos navideños o te sientes como un guiri y empiezas a hacerte fotos sin ningún sentido con todas las luces que se cruzan por tu camino o te sientes como un niño y te quedas embobado viendo esas mismas luces, quieras o no la navidad te devuelve a la infancia, a esa bonita infancia en la que no sabias que los reyes eran una mentira y te levantabas a las 8 d  la mañana para desenvolver los regalos, con las legañas todavía puestas pero con los ojos llenos de felicidad, esos días en los que no sabías que la navidad la ha inventado el Corte Ingles y no te gastabas ni un duro, simplemente te dedicabas a ir a ver Cortilandia, patinas en las pistas, jugar con la nieve y ser feliz. Por eso me gusta la Navidad, porque vuelvo otra vez a esa inocencia en la que era mucho más feliz, sin preocupaciones que revoloteasen por mi cabeza...

viernes, 26 de noviembre de 2010

Soy superprimogénita.

Sí, lo soy. De lo que se entera una por la tele y yo que creía que últimamente me estaba decepcionando, yo que de toda la vida he estado enganchada a la caja tonta, que era de las típicas que me enganchaba a cualquier serie que empezaba, ahora me dedico a ver series en internet que es mucho más productivo o películas, que también me valen..y entonces, cuando he perdido toda confianza en la televisión a color y digital, voy, veo una noche la tele y me dice que soy superprimogénita, responsable y encima queme gusta discutir, así con esa confianza como si me conociera de toda la vida... Será posible. Y pobre de mí me quedo enfrente de esa caja mirando como una señora psicóloga que sale en la tele me dice que estoy encerrada, y que tengo que cambiar... venga y todo en un momento.


Después de esta decepción la noche de ayer, esta mañana me he dado cuenta de una cosa muy curiosa en el metro, sí se que últimamente todo va sobre el metro pero es que me paso tanto tiempo que  me da mucho tiempo para pensar. El caso que me he fijado que todo el mundo en algún momento del viaje se toca el bolsillo para ver si el móvil sigue ahí como si pudiera escaparse de ese lugar oscuro al pobrecillo, ni que le salieran patas o tuviera instinto asesino. O en su defecto buscamos en el bolso y cuando vemos que no lo encontramos nos ponemos nerviosos, lo movemos todo, resoplamos, y volvemos a meter la mano, ya te empiezas   a poner histérica, miras en los bolsillos de la chaqueta, del abrigo, aunque nunca lo metas allí) y entonces vuelves a mirar en el bolso y misteriosamente está ahí encima de todo, y te dices: "¡Seré subnormal!" Entonces te ríes o te sale una sonrisa y la gente te mira, claro después de haber removido todo, tocándole las narices al señor que tienes sentado al lado, que estará pensado: "En que maldito momento se me ocurrió sentarme al lado de esta pesada". Que insoportables podemos llegar a ser...


Además luego, en clase, para que se vea la capacidad de los profesores de hoy en día, va una profesora y pretende tapar las respuestas de una pregunta proyectadas en una pantalla gigante (bueno tampoco es tan grande) con un folio en blanco, pobrecita, que inocente, a ver muchacha, ¿tú no sabes que si pones un folio encima de una pantalla puede que la respuesta no se proyecte en la pantalla pero se proyecta en el folio igual? 

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Con el cerebro derretido. No puedo pensar, lo siento.

Siga a ese coche (siempre he querido decirlo).



NOTICIA: He visto a nuestra querida amiga Helena, conocida también como zanahoria en la autoescuela. Pobre criatura se cree que se va a sacar el carné si el tinte le ha diluido las neuronas ya a estas altura. 


"Para algunos vivir es galopar un camino empedrado de horas, minutos y segundos.Yo más humilde soy y sólo quiero que la ola que surge del último suspiro de un segundo, me transporte mecido hasta el siguiente."

martes, 23 de noviembre de 2010

Otoño.

Esa magnífica estación que pinta la ciudad de colores, el frío llega despacio y disimuladamente como pidiendo permiso para entrar, aunque ya a estas alturas a entrado hasta el fondo. Las hojas caen y cubren el frío asfalto con esa gama de colores cálidos y parece que el sol arrecia menos, todo suena muy bonito, y todo lo es que hasta que va una torpe (yo, para que engañarnos) y se resbala con las hojas, se caen de culo y ve las estrellas aunque sean las 9 de  la mañana. Entonces te intentas levantar, y te vuelves a caer, sí todo muy gracioso. Y todo esto casi casi antes de desayunar y por supuestísimo antes de llegar al metro. entonces pasas los tornos después de un mes sin tener que cambiar el billete porque no te deja pasar (muy raro en mí) y te subes al metro, calentito, incluso hace calor, llegas a Puerta del Sur y curiosamente está ahí el otro metro que tienes que coger, corres como alma que lleva el diablo, bajas las escaleras como si no hubiera mañana, adelantas a la gente, derecha ras, izquierda ras y te metes  muerta de cansancio , cosa que te recuerda que no estás en forma, claro dos años sin hacer ni gimnasia ni nada y en ese momento te arrepientes  de no haberte  apuntado al gimnasio. Pero justo antes de que arranque el metro y después del pitido que indica que se van a cerrar las puertas (pipipi) ves en el panel: "Este tren sólo circula hasta Loranca". Y entonces piensas, ¿para eso he corrido yo como si fuera una maratón? ¿para que me deje una estación antes de la que me tengo que bajar y encima meterme en el proximo metro que va  a ir lleno? Pues sí. Pero (cosa que yo creo que todos nos preguntamos) ¿que cojones hay en Loranca? Un árbol caído, un ovni, un secreto de la CIA, el escondite de un super héroe, una superabuela en silla de ruedas que impide que algunos trenes pasen... Nunca lograré entenderlo. 




Después día sin más, lo más intereasnate ha sido que me he comido un Twist después de años, y que me he vuelto a agobiar por los exámenes. Quiero que pasen estas dos semanas ya por favor que me voy a quedar alopecica perdida. Me estreso y cuando me estreso se me cae el pelo más todavía (si puede ser) y si se me cae el pelo me estreso más. Así que cuando esté calva tendré dos opciones o gastarme el dinero en gorros o comprarme pelucas distintas para cada día y entonces pareceré una loca porque tendré el típico maniquí- cabeza para poner las pelucas y las peinare todos los días para que no se me enreden (como las locas) y con el aire se me volará la peluca y se me verá la cabeza desnuda que brillará y pareceré una bola de billar y entonces no saldré de casa porque me habré traumatizado por el resto de mis días y me quedaré en casa, entonces tendré el síndrome de diógenes y acumularé mierda  raudales y nadie vendrá a visitarme pero como saldrá una peste insoportable de mi casa llamarán a la policía y luego  a psicólogos, etc y como verán que estoy loca me internarán en un manicomio. Todo esto a raíz de los exámenes. ¡¡Raúl Ramírez apruébame por favor!!




Y cuando ya creía que no me podía pasar nada más bajo a la autoescuela, doy clase, y descubro que tengo una compañera que es un clon de Belén Esteban , ¿por qué? Habla igual, tiene el mismo vocabulario y además es rubia.Y luego, para mi sorpresa y admiración, descubro que los que hacen las normas viales quieren que nos muramos todos, sí, sí, que si se te quema la casa y llamas a los bomberos, por mucha prisa que tengan ellos en venir a apagar el fuego, tú si estas en una intersección y tienes un semáforo en rojo no te puedes mover para dejarlos pasar que si no encima te comes una multa. Hay que ver cómo está el mundo Facundo. 


lunes, 22 de noviembre de 2010

Soledad.

Es trsite, muy triste sentirse sólo, porque a pesar de estar rodeado de mucha gente no sientes que nadie conecte contigo en ese momento, que nadie te comprende ni te entiende, simplemente estás ahí porque es el lugar que te ha tocado en el mundo, Quizá por cuestión de enlazar casualidades o por el destino, hay gente que dice que si pasa es porque tenía que pasar y si no porque no tenía que suceder pero que no se puede forzar la máquina que mueve el mundo, el tiempo, la situación, el hecho de encontrare en un determinado lugar en un momento concreto y en ese momento te encuentres con una persona. Eso es el destino, pero eso no impide que al destino se le pueda dar un empujoncito, yendo por donde no tienes que ir, retrasandote en la hora, provocando un encuentro "inesperado". Pero a pesar de todo te sigues sintiendo solo y eso es porque es muy cierto ese dicho de "quien mucho abarca poco aprieta", las personas que pretenden tenerlo todo al final acaban sin nada, sin nada de lo importante porque en el fondo puedes tener todas las cosas materiales pero no tener con quien compartirlas o disfrutarlas y para eso están los amigos, los novios, la familia, los primos... gente que sabes que te importa y que les importa, lo que te pase lo que les pase... todo eso es importante para el transcurso normal de la relación y sí, utilizo la palabra relación, esa palabra que últimamente utiliza todo el mundo y acaba perdiendo el sentido si no lo utilizas en los momentos indicados como confianza, cariño... son elementos que forjan una relación, a veces no demasiado estable, con sus idas y venidas, con subidas y bajadas, pero al final todo vuelve a su cauce y se vuelve a la normalidad. Eso es una relación, pase lo que pase sabes que puedes confiar en el otro y que no te va a fallar, aunque estés en la peor situación, en esos momentos es cuando comprendes que en realidad no estás solo, simplemente tienes que rodearte de la gente adecuada. 


 

 

El tiempo pasa y ellos siempre están ahí. 
 Y los que llegan.



domingo, 21 de noviembre de 2010

Frío.

¿Por qué nos perdemos siempre en los peores momentos? ¿no nos podemos perder en un lugar bonito, lleno de gente, que te guste a donde vas? NO ¿para qué? es mucho más divertido perderse una noche de viernes (o mañana de sábado como lo quieras ver) en la que parece que estás en el ártico más profundo del frío que hace y en una calle dejada de la mano de Dios en la que no pasa ni Peter y si pasa alguien o te mira mal porque se cree que le vas a robar, pegar o a saber que piensa su mente perturbada, o tú eres el que te cruzas con gente extraña que piensas lo mismo que pueden pensar de ti. Si no es así siempre tienes la opción de encontrarte con el típico señor mayor que sale a dar una vuelta con el fresco de por al mañana porque, como todo el mundo sabe, es muy bueno para el cutis el fresqui mañanero y eso lo saben muy bien los abuelos, se hecho fueron ellos los primeros que difundieron la leyenda. Así que vas, le preguntas y o no es de allí, que casualmente está de vacaciones, a ido a ver a un familiar o cualquier cosa pero sea la excusa que sea, no sabe decirte como salir de ese lugar, y tú mientras tanto en proceso de congelación, con unas ganas más que tremendas de llegar  a tu casa para meterte en la cama y comer algo, porque ya se sabe que alals 6 de la mañana es cuando viene el hambre este camino después de estar de fiesta. Y ya te puedes morir del asco que por ahí no va a pasar nadie que pueda ayudarte.


Luego tienes otra variante de frío invernal en Madrid y es la de las tardes de sabado. Una de esas tardes en las que enciendes el ordenador, intentas imprimir algo y curiosamente no hay tinta, así que, con menos ganas que levantarte un día de invierno de la cama, te levantas de la silla, te cambias, y sales a la calle en busca de aventura y ¿por qué no? de un locutorio o similar donde poder imprimir lo que necesitas. Bajas a la calle y viene la primera ráfaga de aire que solo sirve para despeinarte, que bueno si tienes el pelo corto tampoco te destroza la vida, pero con el pelo largo piensas: "¿para qué me he peinado antes de salir de casa?". Todas lo decimos, lo digo por años de experiencia con el pelo largo y lleno de enredos que luego tardas como tres años en quitártelos. En caso que subes la cuesta de la calle en la que al final tienes la salvación para tu problema, o en apariencia, porque llegas y le dices al chico, vengo a imprimir unas cosas.... te mira, y te dice "¿es mucho?". Pues no sé, no me he puesto a contar las páginas pero de lo que estoy segura es que son mas de tres. Te vuelve a mirar y te suelta: "Es que no tengo tinta".  ¿Cómo te puede decir eso una persona que trabaja en un establecimiento donde pone claramente: FOTOCOPIAS, IMPRESIONES... eso es publicidad engañosa, no me ilusiones para luego hundirme en la miseria, estás jugando con la esperanza de las personas, eso no se puede hacer. Después de la decepción te vas a otro lado y como van tan sumamente bine los ordenadores de los locutorios, después de luchar para que entre el pen en el agujerito indicado y al ordenador le apetezca reconocerlo, lo imprimes y te vas. Como ves que es una tarde de sábado y es muy triste quedarse en casa, llamas a una amiga y nada ahí estáis cómo si fuerais masocas en la parada de un autobús a pocos grados por encima de cero. Para no congelaros termináis dando vueltas en un chino, haciendo como que miráis para comprar algo, para no morir de congelación. Que es muy triste pero siempre es mejor hacer el ridículo que pillar un resfriado. 


viernes, 19 de noviembre de 2010

Métete en la bañera.



Relájate, se te destensas los músculos, te sientes bien, a gusto, desconectas de todos los problemas, agobios o de la vida en general. Entonces metes la cabeza dentro del agua.. te quedas unos segundos y escuchas tu corazón y conectas con tu yo interior, piensas, meditas, hablas contigo misma sobre todo, absolutamente todo y te sientes bien, protegida, como si en ese momento no te pudiera pasar nada, como si nada en el mundo pudiera pasar ni a ti ni a nadie. El tiempo se detiene, escuchas la música del Ipod que cada vez la oyes más y más lejana hasta que simplemente se convierte en un susurro al que ni siquiera prestas atención, pasan las canciones y tu sigues allí, tumbada, con las piernas fuera del agua, con los ojos cerrados y escuchando un corazón que cada vez tiene los latidos más lentos, curiosamente, al revés que el resto de ruidos, se escucha cada vez más y más alto hasta que suprimes todos los ruidos externos y sólo oyes eso, el latido de tu corazón que te recuerda que estás viva, y que el tiempo pasa, que las cosas ocurren y que tienes que volver a la realidad.Sientes como el agua recorre tu pelo desde la raíz hasta llegar  a las puntas y entonces se suelta esperando unos segundos, como esperando a que le den permiso, y se suelta, se deja caer hacia el vacío donde se encuentra con el resto del agua, el resto de gotas unidas que están dentro de la bañera y se funde con ellas y ya no se puede distinguir la unidad sino que se convierte en un todo. También notas como se van arrugando tus dedos por el contacto con el agua caliente. Puedes oir , ahora incluso, los pasos de tus vecinos de arriba andando del salón a la cocina, de la cocina al baño, incluso puedes oír la tele y saber el programa que están escuhcando, el perro que ladra y se pone  arañar el suelo en una esquina. Todo esto te hace despertar de el estado de relajación en el que te encontrabas y te acuerdas de que existe más mundo, más personas, personillas, animales... seres, en definitiva que conviven contigo y rompen tu estupenda burbuja en la que todo es más feliz y agradable sin muertes, temor, violencia o cualquier tipo de maltrato. 



jueves, 18 de noviembre de 2010

Leer.

¿Por qué llevar un libro en el bolso, mochila o similar que luego te pesa un huevo y parte del otro? ¿Para qué gastarte el dinero en él o simplemente el paseo hasta la biblioteca y estar pendiente de tener que devolverlo, de los días de penalización, de la típica mujer del mostrador que no se porque será siempre está amargada los días que vas tú y sólo cuando llegas porque te la encuentras hablando por teléfono , sonriente, incluso riéndose a carcajadas y piensas... anda mira que mujer más maja, pero es llegar tú con el libro dice :"espera un momento" se pone el libro en el hombro, te mira mal, te coge el libro y vuelve hablar con su buen humor que debe ser solo para la que esta al otro lado del teléfono? (Que pregunta más larga por Dios) Puedes ahorrarte todo esto y sentarte al lado de uno/ una que tenga libro en el metro/ autobús, y leer lo qeu esté leyendo él ya sea periódico, libro de misterio, de amor, en inglés en español. No vas a saber el final , y si te lees el final no sabes el principio pero es simple por el placer de cotillear, aunque el libro te parezca un coñazo, que está mal escrito y que no te lo comprarías ni aunque te pagarán. Incluso nos ponemos a leernos los apuntes de los demás a ver si nos enteramos. Pero ya lo más de lo más es ir leyendo el libro de la autoescuela (  con lo divertido que es como para resistirse a ojearlo, con todos sus cuadros de velocidades, preferencia de señales, vehículos mixtos, articulados, cuadriciclos, vehículos para personas de movilidad reducida (que sigo averiguando que son)...) y se te sienta uno al lado, hasta ahí todo normal. Tú vas con tus cascos a tu bola, leyendo, escuchando música, y te das cuenta de que el que se acaba de sentar se pone a leer, "bueno ya se cansará", piensas. Pero no, este es de los que no se cansan que un poco más y se baja contigo en la misma estación solo para seguir leyendo, que le tienes que preguntar "¿has acabado?" para pasar la página. Y entonces te sientes incomoda, se empieza a acercar cada vez más porque debe ser que el chaval está medio ciego, pobre, sin dinero para libros y encima sin gafas para poder leer los de los demás. Bueno pues resulta que van pasando las paradas que si arque Lisboa, etc, etc, etc...y el chico que no se cansa. Estará pensando en sacarse el carné porque si no no entiendo que interés se puede tener en el mantenimiento del vehículo. Entonces ya estás hasta los huevos, te giras y le miras, el chaval te mira y ¡ni se inmuta! sigue a su royo. Bueno, pues nada hijo mío como se ve que lo de la intimidad no lo entiendes probablemente dentro de poco ya no lleve el libro de la autoescuela que es muy aburrido, a ver ¿cual te apetece?.


Bueno y para colmo voy  y me corto con el dichoso libro.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Aburrimiento masivo.

Señores y señoras del mundo: ¡Que me pase algo ya, por favor!
Lo que puede dar de sí un tornillo y una tuerca.



¿Cómo quieres entenderme si no me entiendo ni yo misma? Digo blanco cuando quiero decir negro, siempre espero el tren y luego cuando llega ya no quiero cogerlo, me da miedo lo desconocido y puedo ser muy introvertida o muy extrovertida, no me gusta el aire de otoño, pero sí la lluvia cuando es muy intensa y los rayos de sol en pleno invierno, y la nieve, no me gustan las plantas pero sí me gustan los cactus, me encantan los gatos por que son independientes pero también los gatos porque son más protectores, me gusta el silencio pero también estar rodeada de mucha gente, me gustan las tardes de invierno en casa viendo una peli pero también las noches de fiesta por Madrid...

No sé lo que quiero ni cuando lo quiero ¿o sí?



martes, 16 de noviembre de 2010

Madrid.

Esa gran ciudad que se extiende bajo nuestros pies, con su capa de contaminación, altos edificios, metro, autobuses, millones de coches al día, accidentes, mañanas frías (y tardes heladas que probablemente me coja un resfriado por una tarde fría de Madrid), monumentos, parques, pulmones verdes, museos, lugares de ocios, pero lo que realmente forma Madrid son las personas que viven, más bien, vivimos en la gran ciudad. Personas diferentes y polifacéticas, depresivas y alegres, y entonces me doy cuenta de que la ciudad se puede observar de distintas maneras, todo depende de la forma en que cada persona tenga de ver la vida. Se podría decir que hay días rosas, grises, negros, rojos... pero en realidad no, simplemente hay días alegres, tristes, otros días en los que simplemente te quieres morir, o prefieres un tierra trágame... y dependiendo de tu día, la ciudad te parecerá más o menos iluminada, más amable, con gestos mejores y en los que parece que una gran armonía te rodea y simplemente puedes sentirte feliz, porque todo es perfecto sin un motivo concreto simplemente por el simple hecho de la felicidad de vivir en esta ciudad, conocer a esta gente, andar por estas calles, y respirar este aire putrefacto pero que sientes como tuyo. Esto es Madrid. Unos años ya vividos, una vida que te queda, las relaciones que te encuentras por tu camino a lo largo de la vida, los encontronazos con la gente conocida y desconocida, cabreos, desilusiones, lágrimas, esfuerzo, dolor y muchos corazones rotos. 







En esta ciudad también podemos encontrar la autoescuela con los queridos test y el oberbuquin que se produce en la Classic, si es que no puede ser tan popular, que la gente tiene que sentarse en los pasillos para que podamos entrar, y yo como siempre liandola: voy cruzo las piernas y de repente se apagan los ordenadores de la mesa, como veo que no va voy  a decírselo a la chica y viene y le da al interruptor, que los había apagado. Si es que se ve que no manejo el interruptor de los enchufes que le dan la vida (corriente) a los ordenadores. 





Aparte de eso un día normal, más que corriente diría yo, sin nada que comentar. Esperemos que mañana sea un día más interesante.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Adoro el metro.

Sí, lo adoro, sobre todo los días entre semana, y no porque vaya petado, que tampoco.. como todo el mundo se va en dirección al centro yo hasta me puedo sentar y todo por las mañanas. Eso os pasa por ir a todos al mismo lado.. que el centro está sobresaturado y luego la gente se pone nerviosa porque hueles el sudor del señor gordo de al lado que se va leyendo el periódico tranquilamente, que un poco más y te lo mete en un ojo, luego está el chico que tiene los cascos a tope y oyes su música aunque esté en la otra punta del metro (¿para qué gastar batería del ipod si puedes sentarte cerca de él y aprovechar su música? Nunca lo entenderé.), luego está la típica señora que se va pintando y claro, con los vaivenes del metro se mete la raya en el ojo, el niño que tiene una rabieta a las 7 de la mañana (¿cómo pueden tener esa energía los niños para pegar las voces que pegan a esas horas?), yo también lo he vivido queridos pero ahora me ojo la dirección contraria. Bueno y el típico "dejen salir antes de entrar" y la gente se supone que lo hace pero curiosamente antes de salir tú se tienen que meter todos en avalancha, menuda casualidad. Y los típico: "metro de Madrid informa" que por alguna extraña razón el resto del mensaje es ininteligible por lo menos para ti, porque preguntas a tu compi/ amigo que está al lado que qué  ha dicho el bicho ese y curiosamente te lo suelta al pie de la letra. ¡Increíble!


Pero lo que más me gusta el metro es la gente que te puedes encontrar en esos vagones del subsuelo de Madrid, gente que va cantando mientras escucha el ipod (no querida, no eres la única que lo hace, aunque la gente te mire raro igual y alguno que otro esboce una sonrisa) y que te sacan una sonrisa porque parecen, por lo menos a mí me lo parecen, gente simpática; luego los típicos "pasotas" que se sientan como si estuvieran en el sofá de su casa, reposan su culo y abren las piernas todo lo que pueden (¿hola? que hay gente a tu alrededor que necesita espacio vital. Pero a ellos se la suda todo); los típicos que cierran los ojos, se duermen y se despiertan en u estación, yo siempre querré tener esa habilidad; también los que miran con odio a todo el mundo, los hippies happy flower power que a mí de toda la vida me han hecho mucha gracia, los que van leyen do y no se enteran de nada y los que se enteran absolutamente de todo, porque van con la música observando a su alrededor, las niñas que no saben andar con tacones, pero se los ponen porque se sienten mayores, los que van con una simple camiseta en pleno noviembre como si apenas hiciera frío por las mañanas (porque ellos son los más machos)... en fin y un largo etc, que es muy curioso observar. 
Por cierto hoy me ha pasado una cosa graciosa en el metro ya que estoy hablando de todo un poco. Pues esta mañana aquí mi compi de coche Víctor e ha llamado cuando ya estaba en Puerta del Sur y nada , me he puesto hablar con él yo tan normal. De repente, no se a cuento de que ( debería ser muy gracioso lo que estaba diciendo) un señor/chico me ha mirado y ha sonreído, yo me he quedado perpleja a la vez que anonadada y he terminado de hablar. Me he apoyado en la pared y me he sumergido en mi mundo hasta que a llegado el metro. entonces el hombrecillo este se ha acercado al metro como tdo el mundo cuando va  abrir la puerta (todo esto antes de que parar) se ha dado la vuelta y ha sonreído otra vez, que debe de haberme pillado con una cara de subnormal impresionante porque yo con las caras normalmente lo digo todo y en ese momento quería decir una de: "what?" así que... 



Luego, antes de los lunes, tenemos las tardes de domingo, tardes de ver pelis como la Bella y la Bestia (se me ocurre así de repente) y entonces surgen dudas existenciales de Disney: vamos a ver aclarádmelo ¿por qué Lumiere no necesita cerillas para encenderse  las velas, ¿es que acaso tiene superpoderes? y más extraño todavía ¿ por qué el hechizo se rompe con un te amo si de toda la vida se sabe que los hechizos de las brujas se rompen con un beso de amor?  (cosa muy útil para la vida cotidiana) El beso va antes no después. claro cuando ya se ha convertido en príncipe y es rico y guapo ahora si le besas, ¿no? y parecía tonta cuando cantaba... Otra cosa curiosa es que se supone que son películas para niños pero en realidad son dibujos pervertidos, simplemente me remito a que Lumiere sale de detrás de las cortinas de palacio con la chica-plumero y dice: "cuando sea humano podré comer, hacer ejercicio". Y sube las cejas mirando a la plumero disimuladamente. A ver ese movimiento de cejas tiene una sola interpretación no es nada bueno para enseñárselo a niños de 5 años cuando a Chip ni siquiera le pueden explicar que se van a enamorar la Bella y la Bestia y se tienen que dar un beso. Se contradicen.





Y luego están las películas más modernas y más de humanos como A tres metros sobre el cielo, que no tengo nada que objetar aparte de que a Step le llaman Hache y que la chica es tonta pero vamos .. estúpida se podría decir: "prohibido estar tanto tiempo sin vernos". 
Contra el protagonista nada que objetar, siendo el amor de mi vida que voy  a tener que objetar, pues nada ala verdad si es que como resistirse a esa sonrisa que tiene... sin palabras me deja, eso sin hablar de esa cara, esa voz, ese cuerpo, vamos que me lo encuentro por la calle y me da un pasmo. Os dejo el trailer de la peli para que os deleiteis un rato, y para quien le interese, también sale Culebra.


   

    http://www.youtube.com/watch?v=cqgEUWCNZko
       

domingo, 14 de noviembre de 2010

Los 5 euros peor gastados en meses...

Sí, señores, ayer malgaste 5 euros, sí, sí, 5 euros, como si mi economía estuviese para tirar cohetes, que no es el caso precisamente. Ayer el reencuetnro (que a mí me sigue sonando a peli de terror) y claro acabamos donde empezó todo, en los banquitos, que no se porque extraña razón siempre que voy allí termino (por no decir que empiezo la tarde) con el flequillo abierto, lo cual es una gran putada porque siempre son los dias que más fotos hacemos y luego se puede encontrar en el tuenti lo que se encuentra, fotos indecentes y horrorosas, pero bueno. Mis cinco euros perdidos los invertí en una botella de 43 y otra de lima (bueno y un mini) que no los hubiera malgastado si el simpatico señor de la bodega no me hubiera dado la botella caliente.. ni que las tuviera dentro de un microondas. Como todos sabemos el alcohol caliente te sienta como una patada en la boca, así que lo deje qe se enfriara en el mini, porque hacía una temperaura perfecta para enfriar cosas eso sin duda.. que casi se me gangrenan los dedos de la mano (la próxima vez me llevo guantes) y claro después de estar toda la tarde con el mini en la mano (que no es precisamente cómodo) y de haberme bebido una mierda decido desistir y dejarlo... y ahí es cuando me dolió mi dinero.. sentí el dolor aquí, justo aquí, al lado del corazón, menos mal que siempre nos quedara el chcolate , así que con el dinero que sobro nos compramos una tableta de chocolate Nestle, que cuesta más barato que los Donetes, la mejor inversión de la tarde. 

Aparte de eso... mucho, muchñisimo amor..



Muchas ideas de pinza.. demasiadas, pero es que si no no sería un reencuentro, sería una mierda jaja. Incluso portés y todo...por que somos así de dicharacheras. Y yo creo que incluso hicimos adominales de tanto reirnos, por que como todas sabemos es nuestro estado natural y sin beber ni nada, así que para la próxima cero alcohol y más Donetes.




 Muchas caras de dolor que deberían ser de placer 


Muchas fotos...y claro entre tantas fotos, aquí una que es chuiquitita, dice por detrás( con la esperanza de que alguien escuche algo aunque probablemente se oiga más el susurro del viento que mi voz melodiosa y tierna). "No salgo, no salgo". Todo esto dando saltos por detrás por si sale el flash y saalgo por ahi atrás dando saltitos. "Sigo sin salir". Pero.. ¿a quien le importa? Pues a nadie por lo que se ve así que solo sale un cacho de mi cabeza, que se que es mia por el corte de pelo y poco más. Son tardes en las que te surgen (bueno no sé si a todo el mundo, pero a mí sí) dudas existeciales, como por ejemplo, a ver para que me voy a pintar los dos ojos si al final sólo se me ve uno con el pelo, son ganas de gastar raya del ojo y sombra del Deliplus (qué harí ala humanidad sin Mercadona a estas alturas de la vida), pero bueno, yo como buena mujer/chica, me gusta la simetría, por lo menos en los ojos así que me pinto los dos ojos para seguir con la tradición milenaria que han seguido ltodas las mujeres de la historia, y ¿para qué me sirve? Pues para nada, porque realmente solo me sale un ojo.

También hay fotos míticas, que se repetirán durante mucho, mucho tiempo...


Claro, luego cuando llegue a casa estaba agotada despuñes de tanto tragín y en que mal momento se me ocurrió in tentar ver una peli en el ordenador. Elijo la peli y le doy al play. No se escucha (que raro que a mí me pasen estas cosas). Desenchufo y enchufo cables, hago todo lo que puedo hacer no siendo técnico de sonido ni nada por el estilo y nada que no van (altavoces qeu casualmente esta mañana iban perfectamente sin tocar nada) , apago el ordenador llena de odio y rencor y me voy a la tele, pongo la peli y voy y me quedo dormida, ¿tantas vueltas para quedarme dormida y no ver la peli? Para eso me hubiera ido directamente a la cama y me ahorro todo el lío con los cales, que no es que me entusiasme demasiado enchufar y desenchufar cables a las 11 y media de la noche.
(peli que no vi)

Las mañanas de sábado son para descansar, ¿no? Pues no. Las mañanas de sábado son para hacer batuka y conocer a perros con nombre de juego del inserso que tienen una extraña obsesión con los brazos y con chupar leggins ajenos, que se lo perdono porque me cayó bien que si no...





Todo esto sin contar que la noche anterior casi me da un ataque porque después de hacer el examen de historia se supone que las notas iban a estar colgadas a las 12.00. Las 12.01 y no están las 12y cuarto y tampoco, las doce y media y tampoco. Sin calificar que me pone...Yo preguntando, la gente ya sabe las notas, y yo pensando , claro si va por orden de lista me puedo morir aquí esperando, pero no! a las 12.32 la sube... 
Y luego las mañanas de domingo que no ponen nada en la tele y yo me dedico a ver los Thomberrys para recordar viejos tiempos, y eso porque no ponen los Rugrats que molaban muchísimo más.




viernes, 12 de noviembre de 2010

Encierros.

Gente que se queda encerrada dentro de casa sin poder salir, esperando a que alguien le abra y le traiga la libertad de poder ver la luz del sol. Como le pasa a mi querido amigo Víctor, que para un día que se le ocurre venir a buscarme a casa para llevarme en coche, se queda encerado el pobre, y encima se choca con una mujer. Pero tranqui Víctor que no he llegado tarde :D. Y luego el camino de música pokera jaja... volviendo a los orígenes de todo.. y, ¿esta es la salida? Sí, mujer que esta después de la de urgencias. ¿Seguro?... (cara de duda). ¿Por qué será que cuando nos pasa algo a primera hora de la mañana nos fijamos más durante el resto del día en todas las cosas? ¡¡Por miedo!!Sí, sí, por miedo a que te vuelva  pasar cualquier percance. Y como ves que ya te han pasado cosas y probablemente te sigan pasando porque es uno de esos días que te has levantado con el pie izquierdo, te estresas, y te pones más nervioso y entonces te pasan más cosas. Es un círculo vicioso. Entonces, ¿cómo relajarse? Pon una Marta en tu vida :). Te servirá, para relajarte porque te da charleta de camino a  la uni, incluso (si es un buen día) te canta y todo (y mi chófer particular puede dar fe de ello).  Aparte de eso, y si no tienes ninguna Marta a mano (porque lo de multiplicarme todavía no lo controlo) una tilita doble nunca viene mal. Observar al cielo y ver las nubes también relaja y si es de noche las estrellas más pero mejor saca una mantita que ya empieza a hacer frío.




Luego tenemos las intensas y productivas clases de economía,que después de darnos los exámenes y ponerme Gabri nerviosa porque estaba nervioso por el examen, todo esto luego para sacarse un diez ¬¬, empieza a explicar y como da pocas voces la mujer, se empieza a cabrear  y dice: "Los que habléis os vais a ir de clase, pero porque yo no soy mucho de gritar"... eehh ¿disculpa? ¿Qué no eres de gritar me estas diciendo? ¿No será una coña , no? Porque yo después de clase tengo un pitido en los oídos como si hubiera estado en un concierto o en una discoteca  y eso no es que me pase con demasiada frecuencia si no pierdo un poco de audición por sonidos elevados o, altos. Así que, señora profe de economía, explíqueme eso de que no es de gritar, porque creo que tenemos conceptos distintos sobre el tema.




Luego tenemos las tardes de viernes de compras. Esas tardes en las que vas a una zapatería porque te han gustado unas botas, llegas y después de subirte y de bajarte el paseo viendo en todas las zapaterias por si hubiera otra que te gustaran acabas en la primera tienda en la que entraste, que casualmente está en la parte de arriba de la calle, entras (con toda la felicidad del mundo) y le pides a la dependienta tu número (un 37, que debe ser el número más común del mundo porque nunca encuentro), se mete al almacén y al cabo de un rato, te viene sonriente y te dice : "Sólo me quedan 39 y 40" Me parece perfecto pero yo quiero una 37, eso es información adicional innecesaria. Tu cara cambia radicalmente y te inunda la tristeza y la desesperación, al ver tu cara  la dependienta te dice: "Bueno pero en el centro seguro que hay". Coges fuerzas de donde puedes después de la caminata y te vas al centro, pero antes de entrar al andén ¡SORPRESA! un señor pidiendo el billete, tu sacas el tuyo y tan normal, pero tu acompañante( en este caso mi madre) lo saca y dice el señor, espere aquí señora que tengo que subir a comprobarlo, y como hay pocas entradas en Puerta del Ángel (quien viva por ahí lo sabe bien) pues después de media hora, y tú muerta de ganas por encontrar tus botas que te están esperando en el centro, en la tienda ahí abandonadas, vuelve el señor y ya te puedes ir. Entonces llegas al centro caminata de Opera a Carretas. Viendo tiendas, esquivando a gente y entonces.... "sshht, shht" Me encuentro con Lucía. Sigo mi camino y nada entro en todas las zapaterías porque como mi intuición femenina me dice no va a  haber las botas que quiero, pero resulta  que en todas sólo hay las Mustang de esta temporada. Pues yo no quiero esas, ¡no señor!. Llego a la zapatería indicada, entro, pregunto y, ¿a que no sabéis que? No hay de mi número. Como veo que no va  a haber me resigno y me voy a ver ropa. Que si PUll & Bear, Fresca, Stradivarius, Zara.. y nada pero entonces llego al Lefties (mi querido Lefties) y me encuentro con las gangas del día.. cojo de todo, lo meto en el probador, y todo me queda bien , increíble pero cierto (después de diez tiendas ya empezaba a ser hora de que algo de lo que me probara me gustara) y me lo llevo. Acabo saliendo con dos baqueros, una cami, y unas botas, además de unas medias que me han hecho gracia. Después de toda la tarde, ya muerta de cansancio decidimos irnos al bus, y me encuentro con Mimi, Grecs, Luci y la Ro ( que te has cortado el pelo, me he dado cuenta jaja). Entonces así como quien no quiere la cosa entramos en Blanco, simplemente por enseñarle una cosa a mi madre y me las encuentro ahí, grises, preciosas, en un rinconcillo, mirándome con cara de pena como diciéndome "cómprame, cómprame" ¡las botas que estaba buscando!Me las pruebo y me quedan así que me las llevo. Ya si que vamos decididamente al bus... entonces pasamos por delante del McDonald, y ¿a  quién después de un día duro no le apetece una hamburguesa de un euro? Pues no nos resistimos, para que y nos sentamos en los sillones tan cómodos del McDonald de la Gran Vía, media hora después cogemos el bus (por fin) y a casita. Y aquí estoy con mi pijama de rayas y con un dolor de pies de morirme, esto sin contar que mañana (masoka de mí) he quedado con mi Maxi y con Alber para hacer batuka.








Esta foto es por el gatito de en medio que es superlindi.